Yo sé quién es Jehová

CDMX, viernes 5 de junio de 2020

Texto: Josué 2: 1-11

Josué es elegido para llevar al pueblo de Israel a la tierra prometida, Dios le ordena levantarse y pasar el rio Jordán con todo el pueblo de Israel.  Hay estrategia, conflicto y conquista hasta tomar posesión de la tierra.

Dios eligió a Josué para dirigir a su pueblo. Confianza en Dios y valor son las virtudes que lo caracterizaron. Josué ordeno que el pueblo se preparase para cruzar el rio Jordán dentro de tres días.

En este pasaje vemos que Dios tiene un propósito en este tiempo de espera. La misión de los espías de reconocimiento militar falla, pero Dios tiene otros planes que si tendrán éxito.

En ese pasaje vemos a los espías enviados a reconocer la tierra y la ciudad de Jericó.

En el versículo 1 dice:

Josué hijo de Nun envió desde Sitim dos espías secretamente, diciéndoles: “Andad, reconoced la tierra, y a Jericó.” Y ellos fueron, y entraron en casa de una ramera que se llamaba Rahab, y posaron allí.»

Según el diccionario bíblico (Nelson). Sitim – del hebreo significa: «acacias». Abel – Sitim.

Se localiza en los campos de Moab, Era un Valle aparentemente bien conocido por su sequedad y su esterilidad, pero había acacias.  está aproximadamente entre 8 u 11 km al este del rio Jordán frente a Jericó.

Josué como general y estratega del ejército de Israel, desea conocer al enemigo por lo que envía espías a reconocer el campo y la ciudad de Jericó.

Cuarenta años antes, Josué mismo había entrado en la tierra de Canaán como espía. Su misión fue llevar los frutos de la tierra, recorrerla y ver la posibilidad de que los hijos de Israel la tomaran. Esta vez la misión de los espías sería diferente. Debían elegir la mejor manera para que Israel entrara a tomar la tierra y conquistar la ciudad de Jericó.

En la segunda parte del verso 1 dice:

“Y ellos fueron, y entraron en casa de una ramera que se llamaba Rahab, y posaron allí.»

No se nos dice cómo se encontraron los espías con Rahab, sino que ella les abrió la puerta de su casa.

No se menciona quienes fueron los espías, pero es seguro que se encomendaron a Dios, iban al campo enemigo y solo Dios podía guiarlos en esta misión. Tratarían de pasar desapercibidos, entraron en la ciudad, recorrieron las calles tratando de encontrar sitios de interés estratégico, el Palacio, el cuartel militar, el mercado, hasta que llegaron a la casa de Rahab.

La ciudad estaba alterada tenían noticias que los Israelitas estaban cerca por tanto habría mucha vigilancia para los extranjeros. Que mejor lugar para tratar de pasar desapercibido que con Rahab la ramera. Este pasaje nos presenta a una mujer de carácter y moralidad dudosos. Era prostituta y su nombre era Rahab. Quien según algunos estudiosos tenía servicio de hostería, es decir un establecimiento donde se brinda alojamiento y alimento a quienes pagan por estos servicios

En los versículos del 2 al 7 Dice:

2.- Y fue dado aviso al rey de Jericó, diciendo: “He aquí que hombres de los hijos de Israel han venido aquí esta noche para espiar la tierra.”

3.- Entonces el rey de Jericó envió a decir a Rahab: “Saca a los hombres que han venido a ti, y han entrado a tu casa; porque han venido para espiar toda la tierra.”

4.- Pero la mujer había tomado a los dos hombres y los había escondido; y dijo: “Es verdad que unos hombres vinieron a mí, pero no supe de dónde eran.

5.- Y cuando se iba a cerrar la puerta, siendo ya oscuro, esos hombres se salieron, y no sé a dónde han ido; seguidlos aprisa, y los alcanzaréis.”

6.- Mas ella los había hecho subir al terrado, y los había escondido entre los manojos de lino que tenía puestos en el terrado.

7.- Y los hombres fueron tras ellos por el camino del Jordán, hasta los vados; y la puerta fue cerrada después que salieron los perseguidores.

Rahab recibió a los dos espías enviados desde Sitim los reconoció como extranjeros israelitas y los escondió.

Alguna persona se dio cuenta de que había algunos extranjeros en la casa de Rahab y dio aviso a la guardia del rey. Los espías habían sido descubiertos, Los soldados exigían a Rahab que los entregara. La situación era comprometida, ella tenía bajo su cuidado a toda persona que estaba bajo su techo era su deber protegerlos, pero también debía obediencia al rey.

Jericó era una ciudad pagana y pecadora, donde adoraba a toda clase de Dioses y con costumbres desordenadas e inmorales. Rahab era una de ellos, sin previo conocimiento de Dios.

 Pero ha llegado a sus oídos la información de que el Dios de Israel es poderoso y cuida a su pueblo. ella toma como verdadera esta información y toma la decisión de esconder a los espías, mentir acerca de su paradero y al hacerlo pone en riesgo su vida y la de su familia. 

En los versículos 8 al 11 dice:

8.- Antes que ellos se durmiesen, ella subió al terrado, y les dijo: 9.- “Sé que Jehová os ha dado esta tierra; porque el temor de vosotros ha caído sobre nosotros, y todos los moradores del país ya han desmayado por causa de vosotros.

10.- Porque hemos oído que Jehová hizo secar las aguas del Mar Rojo delante de vosotros cuando salisteis de Egipto, y lo que habéis hecho a los dos reyes de los amorreos que estaban al otro lado del Jordán, a Sehón y a Og, a los cuales habéis destruido.

11.- Oyendo esto, ha desmayado nuestro corazón; ni ha quedado más aliento en hombre alguno por causa de vosotros, porque Jehová vuestro Dios es Dios arriba en los cielos y abajo en la tierra. 

Rahab arriesgó su vida y la de su familia, No tenía por qué haberlo hecho, ella era una mujer pecadora con muchos defectos, había vivido en Jericó toda su vida, tenía su hostería y estaba trabajando en una profesión en la cual todo valía. Pero algo la ha cambiado. La fe de Rahab en Dios se escucha fuerte y convincente, al leer estos versículos. Donde muchos Israelitas dudaron y decían a Moisés Porque me trajiste a morir en el desierto, Rahab sin ver la gloria de Dios y las señales hechas en Egipto y en el desierto, Creyó y sin dudar, reconoce que Dios es Dios arriba en cielo y abajo en la tierra.

En Romanos 10 :17 Dice:

Así que la fe es por el oír y el oír, por la palabra de Dios.

Rahab consideró la evidencia y escogió entonces poner su confianza en Dios. Oyó, creyó y actuó

Una nueva fe, cambio su forma de ser y de actuar. En hebreos 11 se nos habla de la fe.

De hombres y mujeres que a través de los tiempos y en diferentes circunstancias tuvieron fe en Dios. En el versículo 31 dice:  

Por la fe Rahab, la ramera, no pereció juntamente con los desobedientes, porque recibió a los espías en paz.

Dios a través de su palabra, nos pide que escuchemos su voz. Él está a cada momento con nosotros y nos cuida.

En Romanos 5:1 dice

Justificados, pues, por la fe, tenemos paz para con Dios por medio de nuestro señor Jesucristo;

Hermanos tengamos fe, oigamos la voz de Dios, creamos en sus promesas y actuemos como sus hijos.

A. I. Nelson Daniel Miranda Giles.

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