Reflexiones sobre la carta a los Efesios – En el asimismo tuvimos herencia – Efesios 1:11

Serie sobre la carta a los Efesios por el A.I. Marcos Mercado Estrada
Iglesia Nacional Presbiteriana Berith
Cd. de México

Buenos días, doy gracias a Dios porque el día de hoy continuamos con la décima primera de una serie de meditaciones sobre el contenido del gran libro de los Efesios y hoy vamos a poner nuestra atención en el versículo 11 del capítulo 1, que dice

11 En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad.

 Vayamos ahora a la 1ª frase del versículo 11 que dice:

11 En él asimismo tuvimos herencia,

HENDRICKSEN

Ef. 1:5 nos dice que el Padre “en amor nos predestinó para ser adoptados como hijos”. Y al haber sido hechos hijos por adopción, en consecuencia, también somos herederos

Col. 1:12, dice con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz;

Romanos 8: 17 dice Y si hijos, también herederos; herederos de Dios y coherederos con Cristo, si es que padecemos juntamente con él, para que juntamente con él seamos glorificados.

Ahora bien, cuando este versículo dice en el asimismo. la palabra “asimismo”, da a entender e implica que ya hemos recibido otras bendiciones.

¿Cuáles son estas bendiciones hemos recibido?:

Miren ustedes, esta valiosísima herencia se nos concede en dos etapas: algunas bendiciones nos fueron otorgadas al momento de creer en Cristo y otras, nos serán dadas en el futuro.

Son bendiciones que tienen que ver con nuestro pasado que implican la liberación de aquel terrible poder que nos tenía atados, el perdón de los pecados pasados, la liberación de la potestad de las tinieblas), y

Por medio de Cristo,

1. hemos recibido la redención,

2. el perdón de los pecados,

3. El discernimiento (la iluminación espiritual sabiduría)

Y que tienen que ver con el futuro:

4. se nos otorgó el derecho a disfrutar de la gloria futura.

Y aunque todo esto es muy maravilloso, las bendiciones que Dios nos ha dado no concluyen aquí, sino que además “Nos ha hechos herederos”, y herederos son aquellos que, sin contar con méritos personales, reciben derecho a todas las bendiciones correspondientes a la salvación en Cristo Jesús, y que jamás les serán quitadas.

En el texto original en griego, la palabra ἐκληρώθημεν (ekleróthemen) se encuentra en un modo pasivo lo que indica que la acción no se origina en nosotros, sino que somos los receptores de la acción, por lo que El verbo que se usa en el original debe ser interpretado como verdadero pasivo, en armonía con pasivos tales como “habiendo sido predestinados” (v. 11) y “fuisteis sellados” (v. 13).

 En cuanto a la forma verbal, cabe la posibilidad de traducirlo: Fuimos hechos herederos o participantes de la herencia”

Efesios 1:13-14 dice; En él también vosotros, habiendo oído la palabra de verdad, el evangelio de vuestra salvación, y habiendo creído en él, fuisteis sellados con el Espíritu Santo de la promesa, 14 que es las arras de nuestra herencia hasta la redención de la posesión adquirida, para alabanza de su gloria.

De ahí que nada podrá trastornar la futura gloria de los elegidos.

Ahora bien ¿Cuáles son algunas de las características de nuestra herencia?

1 Pedro 1:3-5 menciona algunas de las características de la maravillosa e increíble herencia que tenemos en los cielos de la siguiente manera:

3 Bendito el Dios y Padre de nuestro Señor Jesucristo, que según su grande misericordia nos hizo renacer para una esperanza viva, por la resurrección de Jesucristo de los muertos,

Y fíjense en lo que dice:

4 para una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros,

5 que sois guardados por el poder de Dios mediante la fe, para alcanzar la salvación que está preparada para ser manifestada en el tiempo postrero.

Pero vayamos a la 2ª frase de este versículo

habiendo sido predestinados

Lo que determina nuestro destino no es ni la suerte ni el mérito humano.

Alguien podría objetar, “¿acaso estas bendiciones de la salvación, así las futuras como las presentes son realmente nuestras? ¿Existe la certeza de que el plan de Dios para nuestras vidas nos asegura también el futuro?”

Les recuerdo dos versículos que analizamos anteriormente en Efesios 1|:4-5

 según nos escogió en él antes de la fundación del mundo, para que fuésemos santos y sin mancha delante de él, en amor habiéndonos predestinado para ser adoptados hijos suyos por medio de Jesucristo, según el puro afecto de su voluntad

Hemos sido predestinados según el propósito de Aquel que hace todas las cosas según el consejo de su voluntad

predestinados para que fuésemos santos e irreprensibles y todo como parte de un plan más extenso que abarca todo el universo y que está descrito en Efesios 1:10, que dice:

10 de reunir todas las cosas en Cristo, en la dispensación del cumplimiento de los tiempos, así las que están en los cielos, como las que están en la tierra.

Y todo esto es posible porque Dios es no solamente el autor sino también el ejecutor de todo.

Su providencia en el curso del tiempo es tan amplia como lo es su decreto desde la eternidad.

Ahora bien, el versículo 11 que estamos analizando concluye con una tremenda declaración ya que dice que todas estas cosas son:

conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad

Y las palabras “el que hace todas las cosas según el designio de su voluntad””. Es una expresión admirable de la omnipotencia de Dios, ya que no hay voluntad alguna que pueda prevalecer contra el consejo de la suya.

Y significa que puede realizar todo lo que ha determinado según los postulados de su propio ser.

Y sigue ordenando todas las cosas para conseguir la consumación de todas las cosas que Él ha determinado;

Y es bien cierto que su plan divino abarca todo el universo y su realización se está llevando a cabo en el curso de la historia, y no existe nada que pudiera inquietar o dar temor a los hijos de Dios.

Sino todo lo contrario, ya que el único Dios vivo y verdadero, tiene un amor hacia los suyos que sobrepasa todo entendimiento.

Todos sus designios son santos, y se deleita en recompensar a los que confían en él.

Y lo que sea Dios se ha propuesto es seguro que se va a cumplir; ya que aquí dice que Él “hace todas las cosas según el consejo de su voluntad.”

Es decir, cuando una vez que su voluntad ha decretado que algo sea así, su sabiduría, poder y amor se combinan para ordenar y anular el curso de los acontecimientos para que todas las cosas sean hechos para trabajar juntos para el logro de lo que ha planeado.

CONCLUYO

William Hendricksen escribió:

Aquel, que en su amor ha predestinado a su pueblo para ser adoptados como hijos, jamás se olvidará de ellos, sino que llevará a su término lo que en ellos comenzó (Fil. 1:6). Llevará a cabo su plan hasta el final mismo. Ninguna circunstancia podrá jamás frustrar su designio. “Ni el pecado, ni la muerte, ni el infierno podrán desviar aquel inmovible amor causal de la predestinación”.

FF BRUCE agrega:

Como los creyentes fueron preordenados «para adopción como hijos», entonces está implícita su inclusión en la herencia de Dios que es un objeto de la predestinación divina.

Finalizo repitiendo este hermoso texto bíblico que hemos analizado:

11 En él asimismo tuvimos herencia, habiendo sido predestinados conforme al propósito del que hace todas las cosas según el designio de su voluntad.

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