Sociedad Femenil Lidia – 21 de septiembre, 2022

Miércoles 21 de septiembre de 2022.

Génesis 4:25 y 26

La línea de los Escogidos

La última vez que estudiamos Génesis vimos “La linea de los caídos” y señalamos que inicia con Caín y a lo largo de la historia hay una linea de seres humanos que se declaran adversarios de Dios.  Vimos que el carácter del género impío de los cainitas se manifestó ampliamente en Lamec y sus hijos.

Por otra parte también hay una línea de seres humanos piadosos, temerosos de Dios.  Después de la muerte de Abel nació un tercer hijo de Adán y Eva, a quien su madre le puso por nombre Set (Shet en Hebreo que significa sustituto/compensación), porque dijo ella: “Dios me ha sustituido otro descendiente en lugar de Abel a quien mató Caín”.  En esta frase de Eva se menciona el epíteto divino Elohim, que apunta a un Dios omnipotente, todopoderoso.

Posteriormente a Set también le nació un hijo, a quien llamó Enós (v. 26), y fue entonces que los hombres comenzaron a invocar (llamar) el nombre de Jehová.

Esta palabra que fue traducida como Jehová en la versión ReinaValera proviene del Hebreo יהוה, este nombre es el que Dios le reveló a Moisés en Exodo 3:14, cuando lo llamó para sacar a Su pueblo de Egipto.

יהוה. Este nombre en hebreo consta de cuatro letras consonantes, en la Biblia Hebrea el texto aparece sólo con consonantes, en la primera etapa del idioma Hebreo sólo había consonantes, no había signos vocálicos, fue hasta la edad media que los masoretas (cuidadores de la tradición) inventaron un sistema vocálico y vocalizaron todo el texto bíblico (Antiguo Testamento).

Estas cuatro consonantes corresponden al verbo ser o estar en Hebreo, pero en realidad nadie sabe cómo se pronuncia vocalizado, porque Dios se lo reveló a Moisés, pero el texto bíblico fue transmitido por tradición oral durante muchos siglos, desde la época de Moisés hasta el siglo X AC cuando fue puesto por escrito.  Sin embargo, como le fue prohibido al pueblo pronunciar el nombre de Dios, desde la antigüedad para el pueblo hebreo y hasta hoy para los judíos; no se transmitió la pronunciación por tradición oral y no quedó por escrito.

Desde la antigüedad y hasta hoy, cuando en la escritura se encuentra este epíteto divino יהוה los hebreos y ahora los judíos dicen “Adonay” (El Señor) o “Hashem” (El Nombre).

Ahora bien, como ya mencioné, no fue sino hasta la Edad Media que los masoretas vocalizaron el texto sagrado, cuando se encuentra este epíteto divino ( יהוה )  pusieron las vocales de Adonai y de Elohim, es decir e, o, / o, a.

Es decir: la primera consonante es la “yod” que suena como “y”,

La segunda consonante suena como “h”, la tercera consonante suena como “v” y la última nuevamente es una “h”

Si a la primero yod le agregamos la vocal “e”, a la “h” le agregamos la vocal “o” y a la “v” la vocal “a”, queda Yehova o Yavhe, con las vocales de Elohim, e, o; lo cual fue traducido al Español como Jehová, pero en realidad ese no es el nombre de Dios, pues nadie sabe cómo se pronunciaba el nombre de Dios.

Moisés escuchó directamente de Dios, como llamarlo, esto lo leemos en Exodo 3:13 y 14:

 Exodo 3:13 “Dijo Moisés a Dios; He aquí que llego y a los hijos de Israel y les digo: El Dios de vuestros padres me ha enviado a vosotros.  Si ellos me preguntaren: ¿Cuál es su nombre?, ¿qué les responderé?

Esta pregunta de Moisés a Dios, fue porque en la antigüedad cada pueblo o región tenía su propio dios y cómo sabemos en Egipto tenían varios Dioses, por eso Moisés le pregunta a Dios ¿qué les responderé? si me preguntan ¿Cuál es su nombre? es decir, de cuál dios nos estás hablando, pues el pueblo que vivía en Egipto no conocía al único Dios verdadero, al Dios creador, y es aquí cuando el Dios verdadero se revela a su pueblo escogido como el único Dios.

Exodo 3:14

Y respondió Dios a Moisés: Yo soy el que soy, y dijo; así dirás a los hijos de Israel “Yo soy” me envió a vosotros.

Como ya mencioné el nombre de Dios revelado a Moisés יהוה corresponde al verbo ser o estar en Hebreo, y en el texto hebreo sin vocales corresponde a un tiempo verbal que en hebreo se conoce como un presente continuo, que se podría traducir: “Yo soy el que siempre he sido” el que fue, el que es y el que siempre será, el Dios eterno.

Así que, Dios le reveló a Moisés, cómo debían referirse a Él para reconocerlo como el único y verdadero Dios y posteriormente, cuando Dios le reveló a Moisés la historia de la humanidad que  originalmente se transmitió por tradición oral, y que posteriormente quedó por escrito, Moisés plasmó, que fue en los tiempos de Set y Enós cuando los hombres comenzaron a reconocer al único y verdadero Dios, al Dios creador.

Retomando nuestro tema, es aquí donde inicia la línea de los piadosos, de los temerosos de Dios, de los que reconocemos a Dios como el creador, Set y Enós reconocieron humildemente a Dios, contrariamente a los cainitas que, como ya vimos, manifestaron su orgullo y arrogancia.

Aquí inicia la adoración a Dios por parte de los escogidos de Dios, el hablar con Él, reconocer su grandeza, manifestarle gratitud. 

Es aquí el inicio de dos reinos, por un lado los cainitas, que escogieron el pecado, hacer y actuar en contra de la voluntad de Dios, Caín al asesinar a su hermano, Lamec al tomar para sí dos mujeres, al erigir una ciudad, ellos pusieron los fundamentos para un reino mundano separado de Dios. 

Por otra parte los Setitas comenzaron a invocar el nombre de Su Creador y así poner lo cimientos para  fundar el reino de Dios en la tierra.

En el capítulo 5 de Génesis encontramos la genealogía de Adán, que nos describe la línea de los escogidos, en este capítulo encontramos los descendientes de Adan, la simiente de la mujer, a través de la cual se preserva la promesa de Dios, por medio de Set, desde Adán hasta el diluvio.  Se incluye en este capítulo las edades de los descendientes a través de los cuales continuó la línea de los escogidos, lo cual nos da una cronología de los hechos históricos en la edad primitiva.

La familia de los Setitas reconoció a Dios, empezó a invocar su Nombre y esa cimiente fue preservada a lo largo de los tiempos y sustentada por Dios, así que la línea de los escogidos según Genesis 5 es como sigue:

Adán, Set, Enós, Cainán, Mahalaleel, Jared, Enoc del cual se nos dice que caminó con Dios (v. 22), lo cual significa que vivió conforme a la voluntad de Dios, por lo cual dice la escritura (v. 24) “Caminó pues Enoc con Dios y desapareció, porque le llevó Dios”. 

Es interesante observar que Enoc fue la 7a. generación después de la creación de Adán y Eva, y de él se dice que “caminó con Dios”, en él se manifiesta la santidad para Dios; y Lamec, el descendiente de Caín fue el 7o. (Gen. 4:17 y 18: Adán, Caín, Enoc, Irad, Mehujael, Metusael, Lamec), de la línea opuesta, de los adversarios de Dios, en el cual se manifestó y culminó el pecado.

Es aquí que vemos las dos líneas paralelas, por un lado la de los hijos de Dios, los escogidos y por otro lado la de los caídos, los adversarios de Dios.

Después de Enoc, Matusalén, Lamec que obviamente no es el mismo Lamec descendiente de Caín, sino Lamec padre de Noé, quien engendró a Sem, Cam y Jafet, de quienes fue poblada toda la tierra y como veremos más adelante de la descendencia de Sem es donde continúa la línea de los escogidos.