Llamados a guardar al unidad 2ª PARTE – Efesios 4:4-6

Meditación sobre Efesios 4:4-6 por el A.I. Marcos Mercado E.
Iglesia Nacional Presbiteriana Berith
Cd. de México

Muy buenos días, reciban un muy cordial saludo.

Doy gracias a Dios porque llegamos al capítulo 4 del libro de Efesios que contiene una unidad de pensamiento que va del versículo 1 al 16 que se refiere a la unidad en la Iglesia y el día de hoy solo me voy a referir a los versículos del 3 al 6 y en particular al versículo 4 que dicen de la siguiente manera:

3 solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz;
4 un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación;
5 un Señor, una fe, un bautismo,
6 un Dios y Padre de todos, el cual es sobre todos, y por todos, y en todos

INTRODUCCIÓN

Ya dijimos que los primeros tres capítulos del libro de los Efesios contienen la parte doctrinal del libro.

Y En ellos el apóstol Pablo mencionó el propósito eterno de Dios en la historia, que se manifestó por la muerte de Cristo en la cruz del Calvario por todos los pecadores, al cual Dios con poder levantó de los muertos.

Ahora en los capítulos del 4 al 6 encontramos la aplicación práctica de los valores que se esperan de todos los integrantes de la familia de Dios.

Y el primer valor al que hace referencia es al de la UNIDAD

Los últimos dos jueves pusimos nuestra atención en los versículos 1 al 3, hoy les invito para que la pongamos en el versículo 4 que dice:

4 un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación;

ARMITAGE ROBINSON dijo que es responsabilidad de los miembros de la Iglesia conservar, cuidar y mantener la unidad, y aquí dice que hemos sido llamados a la unidad que Dios ha creado en Cristo: y que hemos sido escogidos para formar parte de una comunidad de privilegio, constituida por la familia de Dios y que somos piedras vivas en este Templo, y también miembros del cuerpo de Cristo que es la iglesia y en consecuencia debemos estar y vivir unidos y debemos estar solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz”.

Los siete elementos de la unidad que se menciona en los versículos del 4 al 6 de acuerdo a Armitage Robinson consisten en una primera triada que abarca: un cuerpo, un espíritu y una esperanza, una segunda triada que comprende un Señor, una fe, y un bautismo y al final concluye con algo importantísimo y esencial al mencionar que como parte de esta unidad todos tenemos un Dios y Padre de todos.

El día de hoy vamos a poner nuestra atención en la primera tríada: Un cuerpo, un espíritu y una esperanza que forman la primera parte de una descripción del carácter de lo que debe ser la unidad cristiana.

Vayamos al primer elemento de esta tríada que es:

UN CUERPO

Se refiere al cuerpo de Cristo, que comprende a todo su pueblo, es decir, incluye tanto a los creyentes judíos como los gentiles que hemos sido reconciliados con Dios y que formamos la iglesia y que somos miembros de la familia de Dios

1 Corintios 10:17 dice: Siendo uno solo el pan, nosotros, con ser muchos, somos un cuerpo;

Y aunque somos millones y millones, no obstante, somos un cuerpo en Cristo

Y como este cuerpo o iglesia no es de origen terrenal ni es una institución de hechura humana, sino que es producto del Espíritu Santo; por eso este versículo habla no solo de un cuerpo sino también de un Espíritu.

Por lo que el segundo elemento de esta unidad que se menciona en este versículo y que debe existir en la iglesia es:

UN ESPÍRITU

Y esto tiene relación con la doctrina reformada del llamamiento eficaz que es la urgente invitación del evangelio o sea el llamado externo aplicado a los corazones de los creyentes por medio del Espíritu Santo, produciendo un llamado interno o eficaz.

Y el Espíritu Santo al impartir a los creyentes el llamado eficaz, produce en nosotros también la unión, de modo que llegamos a ser un organismo espiritual, como dice 1 Corintios 12:13

Porque por un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se nos dio a beber de un mismo Espíritu:

Y de la misma manera que el cuerpo humano aún y cuando tiene muchos miembros o partes, es uno y puede funcionar como una unidad, cooperando los miembros entre sí, así sucede también con la iglesia que, al morar en ella el Espíritu Santo es totalmente influenciada por él, y constituye un solo organismo que funciona como tal.

Y 2 Corintios 13:14 nos habla de la comunión del Espíritu Santo y dice: 14 La gracia del Señor Jesucristo, el amor de Dios, y la comunión del Espíritu Santo sean con todos vosotros.

Además, Colosenses 3:14 dice Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto., y el vínculo es el lazo, el pegamento perfecto para la unidad es el amor y Dios es el autor de la paz,

Y todo esto en contraposición con aquellos que siembran “discordia entre hermanos” que es lo opuesto a guardar la unidad del Espíritu

Y a veces algunas personas hacen comentarios negativos de otra en base a lo que han escuchado de otras personas, por eso

 Proverbios 6:16,19b dice:

16 seis cosas aborrece Jehová, Y aun siete abomina su alma:
Y el que siembra discordia entre hermanos.

Lo cual destruye la unidad

FF BRUCE dijo que hay una correlación entre un cuerpo y un Espíritu, tal y como lo encontramos en 1 Corintios 12:13:

“Porque en un solo Espíritu fuimos todos bautizados en un solo cuerpo, sean judíos o griegos, sean esclavos o libres; y a todos se les dio a beber de un mismo Espíritu.”

Y es que, así como el cuerpo es uno, aunque sus miembros son muchos, así el Espíritu es uno, aunque sus dones y operaciones son muchos.

El tercer elemento de esta primera tríada de la unidad es:

UNA ESPERANZA

Miren ustedes, el ser llamados y luego adoptados como hijos de Dios nos da una esperanza, sin igual, una esperanza firmemente arraigada en las promesas de Dios que no pueden fallar.

También tenemos la esperanza de recibir una herencia maravillosa como dice Col. 1:12  con gozo dando gracias al Padre que nos hizo aptos para participar de la herencia de los santos en luz y todo por gracia de Dios

Y además esta herencia de acuerdo con 1 Pedro 1:4 es:

una herencia incorruptible, incontaminada e inmarcesible, reservada en los cielos para vosotros

Y tenemos además las arras o sea una prenda anticipada de esta herencia y estas arras son una promesa o garantía de la gloria venidera, gloria que va a llegar a nosotros no sólo al separarse el alma del cuerpo en el momento de la muerte sino especialmente en el gran día de la consumación de todas las cosas al regreso de Cristo, cuando nuestros cuerpos convertidos en polvo y cenizas en una tumba resuciten incorruptibles y nuestra alma se una a un cuerpo glorificado.

Además, la esperanza de nuestro llamado, la esperanza que Dios puso delante de nosotros cuando nos llamó por su gracia, es la esperanza de compartir la gloria de Cristo, ya que estamos sentados juntamente con Cristo en los lugares celestiales y somos coherederos juntamente con Cristo.

Y esta es la maravillosa esperanza que tenemos todos los creyentes, a quienes Dios ha llamado conforme a su propósito.

Y no hay una distinción entre los que de nacimiento son judíos y nosotros los gentiles, ni existe una élite favorecida dentro de la comunidad de creyentes, sino que todos tenemos la misma esperanza

CONCLUYO

Este versículo nos habla de un único Cuerpo, vitalizado por un único Espíritu, y que avanza hacia la meta de una única Esperanza.

Concluyo repitiendo a ustedes estos hermosos versículos que dicen:

3 solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz;
4 un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación;