Matrimonio, el gran diseño de Dios – Parte 10 – Proverbios 17:17
Meditación bíblica sobre Proverbios 17:17 por el Alfonso Abascal
Iglesia Nacional Presbiteriana Berith
Cd. de México
La semana pasada hablamos de las cinco clases de amor: amor eros que es el romance, amor sentimental y apasionado, astorgos que es el amor en el que sientes que se pertenecen uno al otro, en el que se busca ser leal y sentir seguridad. Después hablamos de fileo, esta clase amor demuestra cariño y aprecio hacia amigos y confidentes. Y, finalmente el amor agape, el cual no es egoísta, siempre está dispuesto a dar sin esperar nada a cambio; el amor agape es el amor con que DIOS nos ama.
Hoy profundizaremos más sobre el fileo y las implicaciones de esta clase de amor en el matrimonio. Ya mencionamos que el fileo hace amigos y cuál es la importancia del ser amigos y confidentes.
Proverbios 17:17 “en todo tiempo ama el amigo, y es como un hermano en todo tiempo de angustia”
Cuando en la Biblia se habla del amor fileo nos referimos al amor que se le tiene a un amigo sin importar el sexo y suele ser algo que se da de forma natural, es decir, no se puede forzar de naturaleza emocional.
El amor fileo suele ser selectivo basándose en las cualidades de la otra persona y que puede parecernos admirable, inteligente, atractiva, etc. Y, esta no se puede forzar, pero sí cultivar.
En fileo encontramos compañerismo, la interacción y la comunicación. Esta última, la comunicación que resulta ser uno de los principales ingredientes para una buena amistad y un buen matrimonio. Para cultivar esta clase de amor son estos los ingredientes: aceptación del uno al otro, lealtad, fidelidad, respeto, cortesía, no ser celosos y lo principal la comunicación.
Qué enseña la Biblia acerca de cómo comunicarnos. En Santiago 1:19 dice
“por esto mis amados hermanos, todo hombre sea pronto para oír, tardo para hablar, tardo para airarse…”
Como puede notarse, todos estos versículos nos hablan acerca de la forma en la que nos comunicamos con otros y la importancia de no dejarnos llevar por las emociones; todo lo contrario, responder con tranquilidad pensando y conscientes de lo que diremos.
Así en la relación de pareja la comunicación es muy importante y mucho ayudará entender que hombres y mujeres no se comunican de la misma manera, es decir, mientas que la mujer suele ser mucho más expresiva al comunicar sus pensamientos, emociones, gustos, ideas, frustraciones, etc. El hombre suele ser reservado y poco comunicativo.
En ese ser comunicativo, aquí algunas reglas que deben de hacer:
- No compartir a nadie más lo que se reveló en privado.
- Cuando alguno de los dos esté hablando preste atención y escuche con interés… hacerlo ayudará a que la comunicación fluya.
- No interrumpa ni saque conclusiones, esto cortará la comunicación.
- Mírense mientras hablan.
- Busquen pasar tiempo juntos y a solas y que estos momentos sean frecuentes, que no sean tiempos cortos pues es en este tiempo que se puede dar la intimidad y esto ayudará a derribar barreras que uno u otro pueda haber creado o creído. Este tiempo es importante y de mucha ayuda.
¿cómo lograr o activar una buena comunicación?
- Seguido expresen que se aman.
- Reconozca los talentos y capacidades del conyugue y exprésele su gratitud.
- Comunícale cuando estes triste, deprimido o haya un mal entendido pues recuerda que tu conyugue no puede leer tu mente, “hay que hablar y recuerda que en la vida conyugal no siempre se puede estar de acuerdo”.
Pero si no se está de acuerdo ¿qué se recomienda NO hacer?
- No usar el silencio para manipular o castigar. El silencio no ayuda y corta la comunicación. Aprenda a dialogar y hablar de sus diferencias.
- No guardes en el baúl de los recuerdos las frustraciones de situaciones pasadas “el pasado es pasado, olvídalo”
- Estar en desacuerdo n o puede ser sinónimo de pelea.
- Ataquen el problema, no uno al otro. Muy importante, el criticarse u ofenderse no soluciona nada.
- Si hubiera algo que reclamar, respáldelo con hechos, nunca con suposiciones, si no hay evidencia concreta, lo mejor es no decir nada.
- Evitemos los dramas y los gritos.
- No permita que el sol se ponga sobre su enojo, esto va de la mano con guardar las frustraciones en el baúl de los recuerdos, no permita que crezca en su corazón una raíz de amargura generando enfermedades: nerviosismo, migraña, etc. No solo dañará tu salud, también tu matrimonio.
- Al comunicarse algo que no es de su agrado, cuide que no sea una crítica destructiva, busque las palabras adecuadas para no ser ofensivo.
- Evite frases “tú siempre o tú nunca”. Estas formas de expresión provocan más conflicto.
- Sea honesto y confiable. Un buen matrimonio echará mano de estas cualidades.
- Si usted sabe que se equivocó, acéptelo y no se justifique. Reconocerlo ofreciendo una disculpa y/o pedir perdón ayudará mucho.
Tengamos esto en cuenta pues ayudará a desarrollar una buena comunicación y un mejor matrimonio.