
Pongan la mente en las cosas de arriba – Colosenses 3:1-4
Meditación bíblica sobre Colosenses 3:1-4 por el A.I. Saulo Murguía A.
Iglesia Nacional Presbiteriana Berith
La epístola a los Colosenses, como la mayoría de las epístolas de Pablo, comienza con una sección de enseñanza y luego examina el significado práctico de esta enseñanza para la vida diaria del creyente.
El evangelio comienza con reconocer nuestra situación de pecado y nuestra necesidad de ser liberados. Continúa con la gracia y amor de Dios, que nos libera de la esclavitud del pecado y la muerte. Nos exhorta y nos impulsa a vivir como las personas libres que somos en Cristo Jesús.
Dice en esos primeros dos capítulos que la plenitud de la deidad habita en Jesús, y que Él ha reconciliado a Su pueblo consigo mismo por su obra redentora en la cruz, haciéndonos morir con Él a la esclavitud del pecado.
Para vivir en esta libertad es necesario que pongamos nuestra mente «en las cosas de arriba» (Col. 3:2).
Pero, no debemos malinterpretar esto, Pablo no nos dice pongamos la mira en las cosas de arriba como una forma de evasión o que ignoremos las preocupaciones de la vida cotidiana.
Por el contrario, usa este lenguaje para referirse a realidades en la historia de la salvación y cómo esas realidades están conectadas con nuestra vida.
En el capitulo 2 explica lo que significa vivir nuestras vidas en Cristo, diciendo:
«Por tanto, de la manera que habéis recibido al Señor Jesucristo, andad en él» (Colosenses 2:6)
En el capítulo 3, Pablo inicia diciendo:
“Si, pues, habéis resucitado con Cristo, buscad las cosas de arriba, donde está Cristo sentado a la diestra de Dios. Poned la mira en las cosas de arriba, no en las de la tierra» (Colosenses 3:1,2)
Ponemos nuestras mentes en lo que está arriba.
Y la razón para ello no es por que pensemos en forma dualista en la que -según este concepto- el cielo es un bien mayor que la tierra.
La razón para poner nuestras mentes en las cosas de arriba es que Cristo Jesús, habiendo resucitado, ha ascendido al cielo y desde ahí gobierna.
Esencialmente, es lo mismo que «buscar primeramente el Reino de Dios» que vemos en Mateo 6:33, que dice:
«Mas buscad primeramente el reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas os serán añadidas»
Entonces,
¿Qué significa poner nuestra mente en las cosas de arriba?
Que nuestra forma de ver el mundo esté moldeada por el gobierno de Cristo Jesús.
En versículo 3 continua diciendo,
«Porque habéis muerto, y vuestra vida está escondida con Cristo en Dios.»
Hemos sido sepultados con Cristo, hemos resucitado con Cristo, estamos sujetos a Cristo, que ha subido al cielo a la diestra de Dios.
El apóstol Pablo termina esta pequeña sección, con una alusión al regreso de Cristo. Y dice:
«Cuando Cristo, vuestra vida, se manifieste, entonces vosotros también seréis manifestados con él en gloria» (Colosenses 3:4).
Entonces completa toda la narrativa: muerte, resurrección, ascensión y segunda venida.
Para concluir con nuestra meditación, veamos:
¿Qué sucede cuando fijas tus ojos en las cosas de arriba o cuando pones tus afectos en las cosas de arriba?
Tu ansiedad se reduce porque recuerdas que estás fijando tus ojos en Dios, quien con una sola palabra hizo que todo el universo existiera.
Ahora,
¿Cómo mantener nuestra mente en las cosas de arriba?
Mantén la palabra de Dios activa en su vida.
En Colosenses 3:16 «La palabra de Cristo more en abundancia en vosotros…»
A medida que leemos las Escrituras en oración y meditamos en ellas, aprendemos que Dios es un restaurador.
Él puede restaurar las partes dolorosas y lastimadas de tu vida.
Verás con toda claridad que Dios tiene un plan y un propósito para tí en este mundo desordenado.
Termino, recordando la maravillosa promesa del Salmo 34:10, que dice:
«Pero los que buscan a Jehová no tendrán falta de ningún bien.»