Para dar a conocer el misterio del Evangelio – Efesios 6:19

Meditación sobre Efesios 6:19 por el A.I. Marcos Mercado E.
Iglesia Nacional Presbiteriana Berith
Cd. de México

Después de dos años de meditaciones sobre el libro de los efesios, llegamos a los últimos 4 versículos del capítulo seis los cuales los podemos dividir en dos partes: la primera nos habla del deseo del apóstol Pablo, de dar a conocer el misterio del evangelio y la segunda contiene saludos y la bendición final del libro de los Efesios.

Y el día de hoy los invito a de poner nuestra atención en la primera parte que corresponde a los versículos 18 al 20 que dicen de la siguiente manera:

18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos
19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,
20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar.

INTRODUCCIÓN

A pesar de que el apóstol Pablo estaba bajo arresto domiciliario e incapacitado para continuar con sus viajes misioneros, siguió dando testimonio a cada uno de los soldados a quienes, estaba encadenado, los cuales constantemente eran intercambiados; y también dio testimonio a todos los que los que le visitaron.

Y pudo testificarles a muchos entre ellos al esclavo fugitivo Onésimo, a quien llevó a la fe en Cristo.

Por ejemplo, Hechos 28:17-24 cuenta que los principales de los judíos que estaban en Roma vinieron a la posada donde estaba encarcelado para escucharlo exponer “desde la mañana hasta la tarde” persuadiéndoles acercad de Jesús y “Algunos asentían” a lo que dijo.

Es decir, las labores evangelísticas de Pablo no se detuvieron a pesar de que estuvo en la cárcel y durante “dos años enteros” recibió a todos los que a él vinieron, predicando el reino de Dios y. del Señor Jesucristo” y lo hizo “abiertamente y sin impedimento”.

Ahora bien, desde la cárcel donde escribió Efesios exhortó a los cristianos a orar sin cesar y como la oración es muy importante en las epístolas a los Romanos (15:30); 1 Tesalonicenses. (5:25); 2 Tesalonicenses (3:1-2 y Colosenses 4:3, pidió que los lectores lo recordaran en sus oraciones.

Y las primeras tres palabras del versículo 19 dicen:

19 y por mí,

Casi al final de esta carta, por breves momentos pone la atención en sí mismo, y en sus propias necesidades, y pide que cuando oren “por todos los creyentes” también se acuerden de él

Y cuando pidió oren por mí, lo hizo sabiamente por tres razones: 1.-Porque reconoció su propia necesidad de tener fuerzas para enfrentar al enemigo, y 2.- Porque fue lo suficientemente humilde como para pedirle a sus amigos que oraran con él y por él. Y 3.- sabía que necesitaba fuerzas no sólo por su lucha diaria con el diablo, sino para tener éxito para poder ser un testigo efectivo de Cristo en su ministerio evangelístico, mediante el cual estaba rescatando a la gente del dominio del diablo.

Ahora bien, el contenido de su petición incluye dos cosas que se mencionan en el versículo 19 y la primera dice:

a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra

Y a partir del texto original en griego, esta frase podría traducirse más bien como “para que Dios abra mi boca” y lo dice para que Dios ponga en su boca el mensaje y el apóstol sea solo su portavoz, y embajador y que tenga una claridad en su comunicación.

Y la segunda frase de este versículo dice

para dar a conocer con denuedo

Esto podría interpretarse de dos maneras: 1.- Como valentía en todo tiempo para predicar dignamente el mensaje” (Cf. Hch. 4:13) y 2.- la palabra utilizada en el texto original en griego que es parresia, también significa abiertamente y se usaba en aquel entonces para hablar de libertad de expresión democrática que disfrutaban todos los ciudadanos griegos.

Y lo que sucedió es que esta libertad la usó con “valentía, firmeza, franqueza, simpleza y además con “coraje, confianza, osadía, intrepidez, especialmente delante de personas de alto rango” que estaban en eminencia Y por ello es que el apóstol Pablo pide a los efesios que oren para que continuara teniendo libertad.

“Y hay que señalar que el apóstol Pablo solicitó en esta oración algo a su favor para lograr la propagación del evangelio ya que sabía que Dios le había llamado a proclamar el evangelio.

Y sabía que, sobre sus hombros ¡descansaba una pesada carga de responsabilidad! Y por ello pidió estas oraciones porque estaba muy consciente de su propia debilidad y del hecho de que necesitaba del poder y dirección divinos en cada momento de su vida.

Y nos damos cuenta entonces, que lo que desea no es salir de la cárcel, sino libertad para predicar el evangelio.

Las siguientes cuatro palabras de este versículo dicen:

el misterio del evangelio,

Y aquí llama a las buenas nuevas el misterio, porque este misterio solo lo podíamos haber conocido por revelación, y se refiere a la unión de judíos y gentiles de los cuales Dios hizo un solo pueblo en Cristo

En seguida la primera frase del v.20 dice

 20 por el cual soy embajador en cadenas;

El apóstol Pablo, en dos ocasiones estuvo prisionero en Roma, en la primera en una posada o casa rentada y encadenado a un soldado en donde escribió Colosenses, Filemón, Efesios, y Filipenses, y en la segunda en una celda donde la prisión fue dura y severa,

Y las palabras de embajador en cadenas se refieren a que cuando llegó a Roma fue atado a un soldado romano por medio de una cadena esposada a su muñeca en Hch. 28:20.

y esta expresión contiene una paradoja o contradicción, ya que se supone que un embajador tenía privilegios y hoy en día hasta tiene inmunidad diplomática por lo que como embajador no debía estar en la cárcel

Y la contradicción aquí es mucho mayor porque, estamos hablando de un embajador del Rey de reyes y Señor de señores, ¡y ese embajador estaba encadenado!

“Al verse a sí mismo como embajador de Jesucristo, firmemente acreditado para representar a su Señor en la corte imperial de Roma.”  nunca se avergonzó de su Rey ni tuvo miedo de hablar en su nombre, Por el contrario, estuvo orgulloso de ser embajador de Cristo, aunque experimentó la anomalía de ser un “embajador en cadenas”.

La última frase del versículo 20 dice:

que con denuedo hable de él, como debo hablar

Con estas palabras el apóstol Pablo indica que lo que más le interesa no es que su muñeca sea liberada de las cadenas, sino que su boca pueda abrirse para dar testimonio; y no pide que lo dejen en libertad, sino que el Evangelio pueda extenderse libremente y sin obstáculos. Y este el es el motivo de oración que pide a los Efesios que tomen en cuenta

CONCLUYO resaltando dos hechos:

  1. El apóstol Pablo nunca se avergonzó de su Rey ni tuvo miedo de hablar en su nombre, Por el contrario, estuvo orgulloso de ser embajador de Cristo, aunque experimentó la anomalía de ser un “embajador en cadenas” y…
  2. Al igual que Pablo nosotros no debemos olvidar que todos nosotros somos embajadores para proclamar el glorioso misterio del evangelio como dice 2 Corintios 5:20

“Somos embajadores en nombre de Cristo, como si Dios rogase por medio de nosotros; os

rogamos en nombre de Cristo; ¡reconciliaos con Dios!).

Y también 1 Pedro 2:9 dice:

Mas vosotros sois linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios, para que anunciéis las virtudes de aquel que os llamó de las tinieblas a su luz admirable;

Termino repitiendo los versículos en los que pusimos nuestra atención el día de hoy

18 orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los santos
19 y por mí, a fin de que al abrir mi boca me sea dada palabra para dar a conocer con denuedo el misterio del evangelio,
20 por el cual soy embajador en cadenas; que con denuedo hable de él, como debo hablar.

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Reflexiones sobre la Epístola a los Efesios

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