Yo soy Dios, el único que salva – Lucas 2:6-12
Meditación sobre Lucas 2:6-12 por el A.I. José Arturo Medell
Iglesia Nacional Presbiteriana Berith
Cd. de México
Los temas de estos últimos, ha sido basado en Isaías capítulo 43 y hemos conocido de los versículos del 1 al 15 etc.
En esta mañana nos enfocaremos a un versículo, pero les invito que siempre lean todo el capítulo de Isaías 43 y de ser posible todo el libro de este profeta.
Así se podrá entender el texto y el contexto de la meditación.
Hemos estado hablando de que solamente Dios es el que puede salvar. Dios ha sido el Salvador y ahora conocemos que es el Ungido, el Mesías, quien rescatará y salvará a su pueblo, dando en rescate a países enteros por amor a Israel.
Este Dios, que es el que salva se centrará nuestra meditación para obviar tiempo en el versículo 11, de Isaías 43 dice:
11 Yo, yo Jehová, y fuera de mí no hay quien salve.
Hay 3 nombres aquí, el YO, que conocemos de Dios, el SER, el que es, después nuevamente dice, YO JEHOVÁ, es decir, se nombra con el nombre que se da a conocer a Moisés cuando está por libertar al pueblo.
Pero también entonces se da a conocer al profeta Isaías, JEHOVÁ, YO, el que es, el único, y dice que fuera de Él no hay quien salve, entonces hemos de conocer, aprender y entender que Dios mismo salvará a su pueblo de sus pecados; no solamente de los momentos de angustia que vivirían en Isaías en ese tiempo, no solamente de la angustia del pueblo de saliendo de Egipto conociendo el nombre Moisés. No solamente en ese tiempo, sino también en nuestro tiempo. Y lo más importante es cuando esto se cumple en, JOSHUA, Jesús, Jesús es la descomposición del nombre JOSHUA, Salvador y hemos tomado este nombre Jesús también, con el título de “el que salva al pueblo de sus pecados”, esto dijo el ángel en nuestra primera y segunda meditación, JEHOVÁ es el que salva, no hay otro, no hay quien salve, Dios, el que es, el YO soy es el que salva y es anunciado, entonces como Joshua, Jesús, el Salvador, dónde podremos encontrar el cumplimiento de esta palabra de JEHOVÁ, el yo soy, el Dios que salva, lo vamos a encontrar en el nacimiento de Jesús. Dice el evangelio de San Lucas en su capítulo 2 de los versículos 6 al 12, nuevamente les invito a que lean todo del capítulo aquí por tiempo.
Tenemos que centrarnos en los versículos base de la meditación dice Lucas 2 de 6 al 12 en la versión reina Valera 1960.
Lucas 2:6-12 (Reina-Valera 1960)
6 Y aconteció que estando ellos allí, se cumplieron los días de su alumbramiento. 7 Y dio a luz a su hijo primogénito, y lo envolvió en pañales, y lo acostó en un pesebre, porque no había lugar para ellos en el mesón.8 Había pastores en la misma región, que velaban y guardaban las vigilias de la noche sobre su rebaño. 9 Y he aquí, se les presentó un ángel del Señor, y la gloria del Señor los rodeó de resplandor; y tuvieron gran temor. 10 Pero el ángel les dijo: No temáis; porque he aquí os doy nuevas de gran gozo, que será para todo el pueblo: 11 que os ha nacido hoy, en la ciudad de David, un Salvador, que es CRISTO el Señor. 12 Esto os servirá de señal: Hallaréis al niño envuelto en pañales, acostado en un pesebre.
Los pastores estaban cuidando sus rebaños y Lucas relatando que María y José estaban ya dispuestos a llegar, el tiempo del alumbramiento de Jesús, por María.
Estos pastores vigilaban a sus rebaños en las vigilias de la noche y se les presenta un ángel del Señor, y la presencia misma del Señor los rodea de resplandor. Naturalmente temblaban de temor. El ángel con voz firme, pero amorosa, les dice no temáis, no tengan temor, porque les doy el nuevo evangelio, las nuevas noticias del gozo que serán para ustedes y todo el pueblo, por qué está naciendo en la ciudad de David, su Salvador, qué es el Mesías, que es el Cristo, que es el UNGIDO, que es el Señor, qué es Dios quién salva, así entonces ellos conocen, que Dios nacido el Mesías, el UNGIDO, el esperado es quien salva y les es anunciado por un ángel, cumpliéndose lo que, Isaías, dice como profeta del Señor.
Esto entonces nos lleva al siguiente pensamiento.
Reconocemos nuevamente mientras José y María estaban en Belén, A María le llegó el tiempo de tener a su hijo primogénito y como no encontraron lugar en un hotel o en un cuarto, no había dónde pasar la noche, fueron hospedados en una casa donde se guardan los animales. Cuando el niño nació, María lo envolvió en pañales y lo acostó en un pesebre, y esa misma noche recordemos unos pastores estaban cuidando sus ovejas cerca de Belén. Y de pronto un ángel de Dios se les aparece a estos pastores, y la gloria de Dios brilla alrededor de ellos. Este es el anunciamiento esta es la noticia, esta es la buena nueva qué les dice el ángel no tengas miedo, les traigo una buena noticia que los dejará muy contentos su Salvador acaba de nacer, en BELEM, es el Mesías, Es el Señor, lo reconocerán porque está durmiendo en un pesebre envuelto en pañales.
El Dios que salva, el único que puede salvar, estará presente para estos pastores y para aquellos que oigan la voz del ángel recibiendo las buenas noticias, El Salvador. Nació para su pueblo y para nosotros.