En el mundo pero no de el mundo

A veces la distinción entre la Iglesia de Cristo y el Reino de Cristo en muy importante. Son entidades íntimamente relacionadas, pero no son lo mismo. La Iglesia  es la institución más importante en el Reino, pero la Iglesia no es el Reino. Esto quiere decir que nuestro papel como miembro de la Iglesia puede ser diferente de nuestro papel de ciudadano del Reino de Cristo. Los papeles se complementan, pero no son idénticos.

Recibe, por medio de la Iglesia y su ministerio (que es el ministerio de la Palabra), su orientación básica para vivir para Cristo en todas estas esferas de la vida; pero vive su vida, sirviendo a Cristo, fuera de los confines de la Iglesia

Para beneficiar el Reino de Cristo, que es un concepto más amplio que la Iglesia, la Iglesia se preocupa en ser Iglesia y de ejercer su ministerio, haciendo conocida la Palabra de Cristo a fin de que los cristianos, como ciudadanos del Reino, la puedan aplicar a toda esfera de la vida. La institución de la Iglesia, su organización y sus oficiales se ocupan en muchos otros asuntos, incluyendo la política

En cuanto a los asuntos políticos de nuestros días, especialmente la relación del estado mexicano con el Papa y el papado, muchos cristianos encuentran razón para preocuparse. Como ciudadanos del Reino deben ser activos, buscando la verdad y luchando por ella. Deben alzar su voz y hacerse escuchar. Deben señalar los peligros y esforzarse por evitarlos. Los oficiales de la Iglesia, en conversación el otro día hablaron sobre esos asuntos y concluyeron, en una forma no oficial, que los cristianos como ciudadanos deben tomar cartas en el asunto, pero que la Iglesia como Iglesia no debe entrar en negocios, ni oficialmente en la política.

Iglesia Nacional Presbiteriana Berith.
Boletín Buen Óleo
Domingo 18 de marzo de 1990.