La estrategia del enemigo
Meditación sobre Josué 9: 1-4 y 9-27 por el A.I. Nelson Daniel Miranda Giles
CDMX, viernes 31 de julio de 2020
En la conquista de la tierra prometida, los israelitas con la ayuda de Dios destruyeron la ciudad amurallada de Jericó y la ciudad de Hai. Dios les indico lo que debían hacer y peleo por ellos en cada ocasión. El siguiente objetivo hacia el sureste seria la gran ciudad de Gabaón.
En los versículos del 1 al 2 dice:
1. Cuando oyeron estas cosas todos los reyes que estaban a este lado del Jordán, así en las montañas como en los llanos, y en toda la costa del Mar Grande delante del Líbano, los heteos, amorreos, cananeos, ferezeos, heveos y jebuseos,
2. se concertaron para pelear contra Josué e Israel.
Todos los pueblos cercanos habían oído como fue la conquista de Jericó y quedaron asombrados, cuando escucharon como fue destruida Hai se llenaron de temor y se pusieron de acuerdo para combatir frontalmente a los Israelitas en el campo de batalla.
En los versículos 3 al 5 dice:
3. Más los moradores de Gabaón, cuando oyeron lo que Josué había hecho a Jericó y a Hai,
4. usaron de astucia; pues fueron y se fingieron embajadores, y tomaron sacos viejos sobre sus asnos, y cueros viejos de vino, rotos y remendados,
5. y zapatos viejos y recosidos en sus pies, con vestidos viejos sobre sí; y todo el pan que traían para el camino era seco y mohoso.
6. Y vinieron a Josué al campamento en Gilgal, y le dijeron a él y a los de Israel: “Nosotros venimos de tierra muy lejana; haced, pues, ahora alianza con nosotros.”
Un poco al sur estaba el territorio de los gabaonitas. Ellos han visto como los Israelitas han acabado con los pobladores y destruido las ciudades. Decidieron que no combatirán en el campo de batalla, pues saben que si pelean directamente será destruidos, por lo que buscan acercarse a los Israelitas de una manera más astuta.
En los versículos del 9 al 14 dice:
9. Y ellos respondieron: Tus siervos han venido de tierra muy lejana, por causa del nombre de Jehová tu Dios; porque hemos oído su fama, y todo lo que hizo en Egipto»
10. y todo lo que hizo a los dos reyes de los amorreos que estaban al otro lado del Jordán: a Sehón rey de Hesbón, y a Og rey de Basán, que estaba en Astarot.
11. Por lo cual nuestros ancianos y todos los moradores de nuestra tierra nos dijeron: Tomad en vuestras manos provisión para el camino, e id al encuentro de ellos, y decidles: “Nosotros somos vuestros siervos; haced ahora alianza con nosotros.”’
13.- Este nuestro pan lo tomamos caliente de nuestras casas para el camino el día que salimos para venir a vosotros; y helo aquí ahora ya seco y mohoso. Estos cueros de vino también los llenamos nuevos; helos aquí ya rotos; también estos nuestros vestidos y nuestros zapatos están ya viejos a causa de lo muy largo del camino.”
Los Gabaonitas tenían miedo de ser aniquilados, que les suceda como los otros pueblos que fueron destruidos, pero al mismo tiempo sienten respeto hacia el Dios de Israel, saben que Él está peleando por ellos; pero eso no impide que con palabras suaves y engañosas pidan una alianza con Israel.
En los versículos 14 y 15 dice:
14. Y los hombres de Israel tomaron de las provisiones de ellos, y no consultaron a Jehová.
15. Y Josué hizo paz con ellos, y celebró con ellos alianza concediéndoles la vida; y también lo juraron los príncipes de la congregación.
Josué y los príncipes de Israel olvidaron consultar a Dios en este asunto, Ingenuamente creyeron en las palabras lisonjeras y la apariencia engañosa de los Gabaonitas. Dios había mandado destruir a los cananeos y no firmar ningún tipo de acuerdo o alianza con ellos. Josué y los príncipes fueron engañados y se firmó un tratado de paz con los gabaonitas. Cuantas veces nos ha pasado esto hermanos, que hacemos planes, vamos allá o acá y decimos cosas sin consultar a Dios, debemos recordar las palabras del Apóstol Pablo en Colosenses 3: 17
Y todo lo que hacéis, sea de palabra o de hecho, hacedlo todo en el nombre del Señor Jesús, dando gracias a Dios Padre por medio de él.
Hermanos, debemos pedir la bendición de Dios en todo lo que deseemos emprender, para que Él guie nuestros pasos.
En los versículos 19 y 20 dice:
19. Mas todos los príncipes respondieron a toda la congregación: Nosotros les hemos jurado por Jehová Dios de Israel; por tanto, ahora no les podemos tocar.
20. Esto haremos con ellos: les dejaremos vivir, para que no venga ira sobre nosotros por causa del juramento que les hemos hecho.
Después de tres días los Israelitas se dieron cuenta que los Gabaonitas eran sus vecinos, el pueblo empezó a reclamar a los Príncipes, Pero solo les quedo cumplir su juramento.
En los versículos 25 y 27 dice:
25. Ahora, pues, henos aquí en tu mano; lo que te pareciere bueno y recto de nosotros, hazlo.
27. Y Josué los destinó aquel día a ser leñadores y aguadores para la congregación, y para el altar de Jehová en el lugar que Jehová eligiese, lo que son hasta hoy.
Dios había establecido condiciones para la conquista, pues conocía a los pobladores de la tierra. Los Gabaonitas eran hombres fuertes y tenían una ciudad más grande que Hai, pero reconocían que Dios había entregado la Tierra a los Israelitas y había tenido miedo de perecer. Josué debido al juramento no podía matar a los gabaonitas. Ellos sabían que habían hecho mal y no se asombraron mucho al ser leñadores y aguadores, sabían que podían hacer esas cosas para Jehová, sabiendo que no habrían sobrevivido si no estuvieran sirviendo al Señor.
En el libro de Josué vemos que los israelitas enfrentaron en Jericó una ciudad amurallada, cosmopolita con todos los vicios y placeres de aquel tiempo, la naturaleza humana, la codicia ver desear y tomar. En la ciudad de Hai; la derrota por ir a la guerra sin Dios y triunfo cuando vas siguiendo el plan de Dios. En la alianza con Gabaón cayeron en la red del engañador, en las palabras lisonjeras y la apariencia engañosa, tomaron decisiones sin consultar a Dios, que los acompañaran toda la vida. Rahab como los gabaonitas vinieron al Dios de Israel como pecadores, Rahab como una ramera, y los gabaonitas como mentirosos. Ellos llegaron a ser parte importante del pueblo de Israel.
Hermanos nosotros también nos enfrentamos en nuestra vida a estas mismas situaciones la naturaleza pecaminosa del ser humano lo aparta de Dios. Pero Él nos da a todos la oportunidad de reconciliarnos.
En 1ª Juan 5 : 7 al 9 Dice:
7. Pero si andamos en luz, como él está en luz, tenemos comunión unos con otros, y la sangre de Jesucristo su hijo nos limpia de todo pecado.
8. Si decimos que no tenemos pecado, nos engañamos a nosotros mismos, y la verdad no está en nosotros.
9. Si confesamos nuestros pecados, él es fiel y justo para perdonar nuestros pecados, y limpiarnos de toda maldad.
Hermanos tomemos en serio la Palabra de Dios. Coloquemos nuestra vida bajo Su control. Jesucristo, es único medio para tener una relación con Él y recibir la salvación. Sabemos que el poder del Espíritu Santo es nuestro único recurso para vencer las pasiones y tendencias de nuestra naturaleza humana, nuestras debilidades. Confiemos en que Dios está con nosotros, oremos por medio de nuestro señor Jesucristo para que el guie nuestros pasos y que todo lo que hagamos sea para su gloria.
A. I. Nelson Daniel Miranda Giles