EL YUNQUE DE DIOS Y EL MARTILLO DE LOS CRÍTICOS

…y la Escritura no puede ser quebrantada.
Juan 10:35

La Biblia es el yunque de Dios que ha roto el martillo de los críticos. Muchos se han levantado con mucho orgullo, con argumentos engañadores, tratando de desacreditar a la Palabra de Dios, afirmando que está plagada de errores y contradicciones. Sin embargo, ni la crítica o la escéptica intolerancia han impedido la marcha victoriosa de la Biblia.
La Biblia es la Palabra de Dios, viva y activa. Ha sido inspirada por Dios, escrita por personas consagradas, proclamada por la Iglesia, enfrentando oposición a lo largo de la historia y, aun así, permanece firme entre quienes creen en ella.
La Palabra de Dios es infalible, porque Jesús dijo que las Escrituras no pueden ser quebrantadas. Es infalible, porque toda la Escritura es inspirada por Dios. Es suficiente, ya que contiene todo lo que necesitamos saber para heredad la vida eterna. Es útil para corregir, exhortar y enseñar a todos nosotros. Es la espada del Espíritu, arma de combate. Es pan para el hambriento, bebida para el sediento, carne para el adulto, la leche para los niños. Es mucho más preciosa que el oro refinado y más dulce que la miel. A través de ella, somos llamados a la fe. A través de ella, somos alimentados y entrenados para toda buena obra.
Hubo muchos ataques en contra la Palabra de Dios, pero cuanto más es atacada, más crece. Es el libro más impreso, más leído y más querido en el mundo. Es el libro de los libros, la revelación de Dios, el mapa de la vida, la fuente de nuestro mayor placer. Siempre viva, siempre presente, siempre oportuna.
El cielo y la tierra pasarán, pero la Palabra de Dios nunca pasará.

IGLESIA NACIONAL PRESBITERIANA BERITH, BOLETIN BUEN ÓLEO Domingo 10 de Agosto 2025

Comparte con tus amigos