EVANGELIZACIÓN
Hablamos mucho de evangelizar; y debemos hacerlo, ya que esta actividad es una de las principales de todo cristiano y de toda iglesia cristiana. Desde luego, no debemos hablar solamente, sino practicar la evangelización. Para hacerlo tenemos que tener una idea de lo que es el evangelizar. Si no tenemos una idea clara es posible que evangelicemos cuando no sabemos que lo estamos haciendo, y, por lo contrario pensar que lo estamos haciendo cuando en realidad no lo hacemos.
Evangelizar es anunciar un evangelio. Un evangelio es un mensaje grato, agradable, de «buenas noticias», como solemos decir. En otras palabras, el evangelio es un anuncio, y proclamarlo es anunciar.
Anunciar es anunciar algo. Si no informa, si no comunica un mensaje, lo que se dice o se escribe no es anuncio. El anuncio tiene un contenido que ha de ser comunicado en forma que da los datos. El anuncio no es solamente el mensaje sino también la manera en que se comunica. El anuncio tiene que darse de una forma clara e inequívoca. Cuando damos anuncios en público, hablamos claro y pronunciamos con cuidado. Hay cierta insistencia en los datos y una repetición. Damos el énfasis a ciertas palabras o sílabas y nos esforzamos a fin de que todos oigan. Pero, todo esto está en función de que el mensaje llegue, que sea en verdad un anuncio.
Si la iglesia «Berith» ha de ser una iglesia evangelista, tenemos que anunciar. Tenemos que decir claramente un mensaje claro. Tenemos que hacer el esfuerzo a fin de que los otros nos oigan y nos entiendan. El mensaje es lo importante en el anuncio, pero la manera de decirlo cobra importancia por la importancia del anuncio.
No debemos pensar que podamos evangelizar solamente por actividades y eventos. Tenemos que saber el anuncio con todos sus detalles y luego disciplinarnos para poderlo proclamar con claridad. Es la información lo que tenemos que comunicar. Tenemos que hacer el anuncio en todas partes, en nuestro trabajo, en las diversiones y en los contactos sociales. Aprendamos pues el anuncio y también como darlo.
Iglesia Nacional Presbiteriana Berith, Boletín Buen Óleo, publicado originalmente domingo 14 de junio del 2010