Bendice alma mía al Señor – Parte 13

Meditación sobre el Salmo 103:21 por el A.I. Marcos Mercado Estrada

INTRODUCCIÓN

Muy buenos días desde la alcaldía de Coyoacán en la ciudad de México, me da gusto enviar un cordial saludo a todos los que en muy diversos lugares nos escuchan en este hermoso día

Hoy continuamos con la parte número 13 y penúltima de las meditaciones sobre el salmo 103, que nos recuerda todas las innumerables bendiciones que Dios derrama sobre nosotros diariamente.

Voy a iniciar leyendo este hermosísimo salmo:

1 Bendice, alma mía, a Jehová, Y bendiga todo mi ser su santo nombre.
2 Bendice, alma mía, a Jehová, Y no olvides ninguno de sus beneficios.
3 El es quien perdona todas tus iniquidades, El que sana todas tus dolencias;
4 El que rescata del hoyo tu vida, El que te corona de favores y misericordias;
5 El que sacia de bien tu boca De modo que te rejuvenezcas como el águila.
6 Jehová es el que hace justicia Y derecho a todos los que padecen violencia.
7 Sus caminos notificó a Moisés, Y a los hijos de Israel sus obras.
8 Misericordioso y clemente es Jehová; Lento para la ira, y grande en misericordia.
9 No contenderá para siempre, Ni para siempre guardará el enojo.
10 No ha hecho con nosotros conforme a nuestras iniquidades, Ni nos ha pagado conforme a nuestros pecados.
11 Porque como la altura de los cielos sobre la tierra, Engrandeció su misericordia sobre los que le temen.
12 Cuanto está lejos el oriente del occidente, Hizo alejar de nosotros nuestras rebeliones.
13 Como el padre se compadece de los hijos, Se compadece Jehová de los que le temen.
14 Porque él conoce nuestra condición; Se acuerda de que somos polvo.
15 El hombre, como la hierba son sus días; Florece como la flor del campo,
16 Que pasó el viento por ella, y pereció, Y su lugar no la conocerá más.
17 Mas la misericordia de Jehová es desde la eternidad y hasta la eternidad sobre los que le temen, Y su justicia sobre los hijos de los hijos;
18 Sobre los que guardan su pacto, Y los que se acuerdan de sus mandamientos para ponerlos por obra.
19 Jehová estableció en los cielos su trono, Y su reino domina sobre todos.
20 Bendecid a Jehová, vosotros sus ángeles, Poderosos en fortaleza, que ejecutáis su palabra, Obedeciendo a la voz de su precepto.
21 Bendecid a Jehová, vosotros todos sus ejércitos, Ministros suyos, que hacéis su voluntad.
22 Bendecid a Jehová, vosotras todas sus obras, En todos los lugares de su señorío.
Bendice, alma mía, a Jehová.
El  versículo en el que vamos a meditar hoy dice

21 Bendecid a Jehová, vosotros todos sus ejércitos, Ministros suyos, que hacéis su voluntad.

Y este versículo inicia diciendo:

BENDECID A JEHOVÁ

Hace ocho días dije que este salmo nos ordena y nos exhorta en seis ocasiones a «bendecir al Señor»

Y Vale la pena resaltar que el salmista empieza y termina el Salmo 103 con la proclamación ««¡Bendice, alma mía, a Jehová!» 

¿por qué lo hace?

Porque enfatiza no solo la importancia absoluta sino también el deber absoluto de todas y cada una de las criaturas de alabar y proclamar la gloria del Señor.

Y ahora que llegamos a los 2 últimos versículos de este hermosísimo salmo aquí, el verbo bendecir está en un modo imperativo plural

Entonces, no es una sugerencia, no es una recomendación, no es una petición  sino que es una orden y ¡Este imperativo nos lleva, nos impulsa a elevar con todo el corazón, nuestra legítima alabanza a nuestro Dios y Creador!

La semana pasada, vimos que a los ángeles se les ordena bendecir a Dios y este imperativo se aplica a cada ángel de Dios.

En el texto que hoy analizamos, David amplía el alcance del imperativo para incluir a «todos, sus ejércitos y sus ministros».

Considerando la importancia de bendecir y alabar a Dios, el salmista, hace un llamado imperativo muy especial a todos sus ejércitos y ministros suyos  y les dice Bendecid a Jehová

21 Bendecid a Jehová, vosotros todos sus ejércitos

¿Cuáles son estos ejércitos?

Apocalipsis 5:11  Y miré, y oí la voz de muchos ángeles alrededor del trono, y de los seres vivientes, y de los ancianos; y su número era millones de millones

Aquí habla de millones de millones, incluidos los ángeles, pero dentro de los millones de ángeles hay algunos que forman parte del ejército celestial

Un comentarista escribió que el ejército celestial es solo una parte del gran conjunto de ángeles, que incluye a los querubines y serafines

Ahora bien, el mismo imperativo que vimos la semana pasada en el versículo 20, que ordena sus ángeles bendecir al Dios Viviente, al Dios del Pacto, al Dios Creador aquí se aplica a “todas sus ejércitos y ministros.

Salmo 103: 21 21 Bendecid a Jehová, vosotros todos sus ejércitos, Ministros suyos, que hacéis su voluntad

En la biblia en múltiples ocasiones se mencionan a los ejércitos celestiales

Nehemías 9: 6

 Tú solo eres Jehová; tú hiciste los cielos, y los cielos de los cielos, con todo su ejército, la tierra y todo lo que está en ella, los mares y todo lo que hay en ellos; y tú vivificas todas estas cosas, y los ejércitos de los cielos te adoran..

Josué cuando inició la conquista de la tierra prometida se encontró con el Capitán del ejército del Señor.

“Josué 5: 13-15 13 Estando Josué cerca de Jericó, alzó sus ojos y vio un varón que estaba delante de él, el cual tenía una espada desenvainada en su mano. Y Josué, yendo hacia él, le dijo: ¿Eres de los nuestros, o de nuestros enemigos?

14 El respondió: No; mas como Príncipe del ejército de Jehová he venido ahora. Entonces Josué, postrándose sobre su rostro en tierra, le adoró; y le dijo: ¿Qué dice mi Señor a su siervo?

15 Y el Príncipe del ejército de Jehová respondió a Josué: Quita el calzado de tus pies, porque el lugar donde estás es santo. Y Josué así lo hizo..

Cuando David se enfrentó a Goliath empleó este título

1 Samuel 17:45  Entonces dijo David al filisteo: Tú vienes a mí con espada y lanza y jabalina; mas yo vengo a ti en el nombre de Jehová de los ejércitos, el Dios de los escuadrones de Israel, a quien tú has provocado.

En el evangelio de Lucas, cuando un ángel anunció a los pastores el nacimiento del Señor Jesús  dice Lucas 2:13

13 Y repentinamente apareció con el ángel una multitud de las huestes celestiales, (del ejército del cielo) que alababan a Dios, y decían:

Y como la palabra que se traduce como huestes es stratiás (στρατιᾶς) y también significa ejército, El texto podría traducirse como “una multitud del ejército del cielo”

Ahora bien a mi me cuesta trabajo imaginar la grandeza, majestuosidad y el poder del ejército celestial, ya que si un solo ángel destruyó a 185,000 soldados del ejército Asirio que era el más poderoso en el mundo en el año 701 a.C

¡Imagínense a un ejército de millones de ángeles!

Y algo que nos ayuda a entender su poderío  es que uno de los nombres de Dios en el Antiguo Testamento es el de Jehová de los ejércitos o el Señor de los ejércitos

Para concluir el análisis de este versículo hay que señalar que la segunda parte  invita a bendecir a Dios y dice

MINISTROS SUYOS QUE HACÉIS SU VOLUNTAD

Esto es, ustedes sus siervos que se esfuerzan en complacerle, sea cual sea la forma en que obedecen su voluntad: ¡bendecidle al mismo tiempo que le sirven! ‘Por qué dice esto?

.

Porque el salmista desea que todos los sirvientes del palacio del gran rey se unan a él para entonar en conjunto alabanzas al señor.

Porque todos los seres que existen están bajo la soberanía de Dios; por consiguiente, todos, todos debemos bendecir su nombre uniendo nuestras voces en un coro universal.

Ahora quiero señalar que Agustín de Hipona al analizar este versículo hace un llamado de atención a todos los que queremos servir a Dios y dice.

Si, bendecidle vosotros «qué hacéis su voluntad» pero que callen todos aquellos que le bendicen con su lengua pero le avergüenzan con su vida y su comportamiento

¿Pues de qué te sirve cantar a Dios alabanzas con tu lengua, si tus acciones no son conforme a su voluntad? Por muchas alabanzas que entones con tu lengua, con tus hechos injustos y tu vida llena de pecado puedes hacer que se blasfeme el nombre de Dios.

Y de una manera dura nos dice Si de veras quieres bendecid al señor, haz su voluntad y pon en práctica lo que te enseña en su palabra.

CONCLUYO

En este versículo nos queda claro que el ejército del cielo, que siempre sirve a Dios haciendo su voluntad, y todos sus ministros o servidores hemos recibido el mandato, es decir la orden, de bendecir al Señor,

Y en este día debemos aprender de los ángeles, del cielo, que son poderosos en fortaleza y también de los poderos e invencibles ejércitos de ángeles del cielo, la forma en que alaban y bendicen a nuestro Dios, para imitarlos y nosotros estar dispuestos a hacer la voluntad de Dios y amarle con todo nuestro corazón , con toda nuestra alma, con todas nuestras fuerzas y todo nuestro entendimiento para con todo nuestro ser decir BENDICE ALMA MÍA A JEHOVÁ

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